30 noviembre, 2007

Los árboles no dejan ver el bosque

Con mucha satisfacción nos hemos enterado en ATINA BOMBEROS, que la Junta Nacional ya adjudicó la compra de uniformes de trabajo normados, para ponerlos a disposición de los Cuerpos de Bomberos cuando estén en el país.

Es una noticia muy positiva que permitirá a los bomberos protegerse mucho mejor. Por el precio en dólares que aparece en la página web, calculamos que el costo será cercano a los $ 500.000 cada uno, que bonificados por la Junta en un 50% quedará en $ 250.000 aproximadamente.

También compartimos la decisión de entregar con el aporte bonificado sólo una cierta cantidad por compañía y si alguien desea más deberá cancelar el total del valor, el que de todas maneras debería ser más barato que en el comercio, nacional o extranjero.

De todas maneras es un costo alto, ya que se trata sólo de chaqueta y pantalón normados, los que deben complementarse con calzado, casco, guantes y esclavina también normados para completar la seguridad que se requiere ante un flamazo o explosión de calor y fuego. Además de los equipos de respiración autónoma.

El disponer de un número limitado de uniformes normados puede significar reformular Órdenes del día del servicio activo de las compañías, lo que seguramente analizarán los estamentos competentes.

No obstante algunos cuerpos querrán adquirir más unidades, lo que pueden hacer si tienen el dinero para pagar el valor total.

El problema puede presentarse con cuerpos que no cuenten con la plata pero sí con contactos políticos o autoridades de gobierno que quieran apoyarlos vía proyectos con financiamiento de los FNDR o fondos de la Presidencia.

No entraremos a analizar la dificultad que pueda tener la Junta en cotizar, ya sea para Chilecompra u otro, el mismo uniforme a dos valores distintos, porque es un problema que deben haber visualizado y no nos corresponde comentar.

Pero aquí comienza una reflexión:

Si estoy equivocado agradeceré me corrijan, porque hay un dicho que dice que “Cada uno piensa con lo que sabe” y nuestro filósofo Humberto Maturana además afirma que “La realidad es la experiencia”.

Por lo anterior debo reflexionar de acuerdo a lo que me ha tocado conocer y en este aspecto la base de mi conocimiento y experiencia están en lo vivido (o sufrido) con la intendencia de la Quinta Región, la que sin dudas no es la que más apoya a sus bomberos.

Por ser la penúltima mala experiencia al respecto, nos basaremos en un proyecto para obtener material menor para los cuerpos de la Región que se presentó hace tres años y del que recién ahora se está recibiendo parte de las adquisiciones.


(La última mala experiencia la estamos teniendo ahora con un proyecto que está en el limbo, ya que aún no podemos saber si el Intendente lo ingresará y patrocinará o no, pues se lo entregamos en sus manos hace más de un mes, lo encontró muy bueno en principio y ahora no nos recibe ni da señales sobre su destino)

El proyecto que comentaremos, al fin fue aprobado este año, gracias a la conmoción que causó en el país la tragedia de calle Serrano. Si no hubiera sucedido, seguro que no se habría concretado aún.

El proyecto se confeccionó en lo pertinente sobre la base de la adquisición de diverso material menor disponible en la Junta, que está subvencionado, el que por dar un número alcanzaba a 1.000 unidades por los $ 600 millones aprobados en éste.

Una vez por fin aceptado el proyecto por el CORE, en Serplac se decidió que todo lo comprarían a través de Chilecompra y no se aceptó a la Junta como proveedor ya que no factura con IVA y no había un convenio marco.

La cotización por Chilecompra como era de esperarse resultó imposible para muchos ítemes, ya que como no se compran elementos o artículos comunes sino especializados, entregar todas las especificaciones técnicas y de calidad, homologarlos, con proveedores posiblemente desconocidos, aparte que significó un enorme esfuerzo para todos, no llegó a conclusiones confiables, pero sí se obtuvieron algunos precios.

Por razones a las que no tuvimos acceso y por ser precios cotizados a proveedores (sin subvención), la cantidad de material a comprar por la intendencia se redujo, quedando, también por dar una cifra como ejemplo, en 800 por los mismos $ 600 millones.

Como no resultó la compra de esos materiales a través de Chilecompra, después de muchas vueltas se optó por firmar acuerdos marcos provinciales con la Junta, lo que se hizo, pero manteniendo el número de elementos en 800, ya que aparentemente por instrucciones de Mideplan, no se puede alterar el número de productos a adquirir según el proyecto.

Pero el número original era 1.000 a un costo de $ 600 mns. y ahora estamos hablando de 800, lo que obviamente le ahorra una importante cantidad de dinero y los bomberos pierden una importante cantidad de materiales.

Pero eso aparentemente es irreversible y parece que no vale la pena seguir analizándolo, pero sí sacar conclusiones para reflexionar.

¿Fue a propósito o por ignorancia lo que sucedió? No podemos calificarlo, pero los más de $150 mns. que se ahorró el Estado del FNDR, ¿quién los puso? Obvio: Los Bomberos por la subvención de la Junta.

El Estado le entrega fondos a la Junta para que adquiera equipamiento para los bomberos -> La Junta licita y compra a los proveedores -> Subvenciona una parte y lo entrega a los cuerpos que pagan un aporte inferior al valor real -> Se cierra un círculo lógico.

Pero cuando el dinero para la compra lo pone el Fisco y se compra a la Junta, se produce un efecto desventajoso para los bomberos en general, por lo que sigue:

Uniforme normado Costo total ........ $ 500.000
................................ IVA ................... 79.832
..............................Neto ................... 420.168
...............................Aporte Junta....... 250.000
.............................Aporte Fisco ....... $ 170.168

A menos que esté muy equivocado, financiar un uniforme con un FNDR le cuesta al Estado $ 90.336 (aporte menos IVA), mientras que los Bomberos ponen $ 329.832.

Es cierto que se benefician bomberos, pero a un costo muy alto para TODOS los bomberos, debido a que por los importantes montos que habrá que invertir en la compra de los uniformes deberá recurrirse al Fondo Solidario del art. 26, lo que en definitiva descapitaliza a la Junta Nacional.

Algo similar sucede con los carros, donde la fórmula es parecida, claro que con valores más grandes.

Hay que tener claro que el Estado entrega dólares para subvencionar la compra de material mayor y menor por parte de los Cuerpos, pero también es cierto que son muy pocos los cuerpos que pueden adquirirlos con recursos propios, por lo que al hacerlos vía FNDR como es el grueso en la actualidad, el sistema se ha desvirtuado en perjuicio de los bomberos.

La Junta recibe para importar carros y material menor, un poco más de US$ 6 millones, lo que no alcanza para cubrir todas las solicitudes, debiendo recurrirse al Fondo Solidario art. 26.

En números gruesos: Si un carro cuesta $100 mns, IVA incluido ($16 mns.), el aporte del FNDR es de $ 40 mns. y los bomberos ponen $ 60 mns, cuánto pone el Estado? $ 24 mns. y los Bomberos $ 76 mns.

En la última Asamblea Nacional se presentó una moción para cambiar el monto de los aportes, pero fue desestimada por lo menos hasta la próxima asamblea.

Pareciera razonable a primera vista, que los precios de los equipos debieran ser los reales y cuando los adquieran los Cuerpos se procediera a aplicar la subvención, pero para eso la Junta no debería estar en medio de una compra.

¿Por qué pensamos lo anterior? Porque según la Ley de Presupuesto los fondos que se le entregan a la Junta son para Adquisición de Material mayor y menor con recursos bomberiles - inferimos - ya que a ellos se pretende ayudar.

Toda compra que no sea efectuada con recursos de los Cuerpos que obligue a utilizar el Fondo Solidario art. 26, nos perjudica a todos y los únicos que ganan son el proveedor, sus representantes y las autoridades de gobierno que se muestran orgullosas de su generosidad.

En ATINA BOMBEROS lo pasamos diciendo: Los cuerpos no son solidarios y si necesitan o quieren un carro no importa de donde ni cómo sale el financiamiento.

Realmente sentimos que el sistema actual y como se supone para el futuro, no es beneficioso para los bomberos, por lo que hay que revisarlo, ya que cada proyecto aprobado que se agradece tanto y que se publicita más, en el fondo significa un muy desigual esfuerzo entre Bomberos y Estado.

MUY DISTINTO ES EL CASO DE PROYECTOS FNDR PARA CONSTRUCCIONES DE CUARTELES, YA QUE SE LICITAN Y FINANCIAN ENTERAMENTE POR EL FISCO. Ese es un aporte en dinero fresco que hace el Estado a los Bomberos.

Lo anterior nos lleva a pensar qué solución podría haber.

¿Puede o debe considerarse a la Junta como un proveedor?

¿No debería proveer sólo a los cuerpos de bomberos?

Entendiendo lo del prestigio, la economía de escala y la ausencia de comisiones a favor de la Junta y lo que se ha obtenido que es muy bueno, ahora que cambiaron los financiamientos ¿no sería más razonable que los proveedores tuvieran representantes en Chile, cotizaran y vendieran sus artículos directamente, o se licitara cada vez que se tratara de un monto importante?

Después de las experiencias descritas, en ATINA BOMBEROS nos queda claro que la Junta no puede ni debe venderle a terceros no bomberos productos subvencionados.

Si la Junta estuviera inscrita en Chilecompra cualquiera podría comprar y los bomberos lo subvencionarían. Es impresentable.

Parece que como están dadas las cosas, debería redefinirse la misión y el rol de la Junta Nacional es este aspecto y lo más luego posible, ya que por los ejemplos anotados se ve que el sistema que se está utilizando beneficia sólo a los proveedores pero no a los bomberos y es muy posible que se incremente en el futuro.

Siempre hemos sostenido que el rol indiscutido, a la vez la razón de ser de la Junta es apoyar el mejoramiento de la gestión global de los bomberos chilenos, lo que se ha cumplido en el pasado, pero en los últimos años, con el advenimiento de los proyectos FNDR, que tan útiles son para los cuerpos que los obtienen, de mantenerse el mismo sistema se está perjudicando el todo.

Reconocemos que los proyectos FNDR son la solución para adquirir carros actualmente, pero creemos que los aportes de cada parte debe revisarse.

Podría ser una locura, pero muchas veces de locuras salen soluciones razonables:

¿Qué pasaría si la Junta se limitara a recibir y estudiar las necesidades de los bomberos y las especificaciones de los equipamientos requeridos, y periódicamente cotizara y firmara acuerdos marco con proveedores calificados, pasando a ser una “Calificadora”o “Certificadora”, que sirviera de aval a las compras que por cualquier vía se hicieran, sean los cuerpos o proyectos fiscales para Bomberos u otras entidades que compran a través de Chilecompra?

Entendemos que para algunos proyectos o situaciones es reconocida por el estado como Organismo Técnico o algo así.

Podría recibir o no una comisión por esto, (desconocemos como se usa en estas cosas) pero debería ser muy interesante para los proveedores estar “calificados o certificados” ya que por lógica sus productos tendrían un gran paso avanzado en ese aspecto y sus volúmenes de venta se verían incrementados.

Así la Junta podría ser un comprador para mantener un stock para las emergencias o las necesidades de poco volumen que pueden tener cuerpos individuales, pero no como el de un representante.

Pero la Junta debería seguir subvencionando todos los requerimientos de los cuerpos que estén dentro de lo que se reglamente, que hagan financiados con fondos propios.

A lo mejor es discutible o totalmente desechable, pero pensar de otra manera es una buena forma de ejercicio para cuestionar los paradigmas o aceptar que éstos podrían haber cambiado y por lo mismo como dicen los expertos “cuando un paradigma cae, se comienza de cero

Es interesante y no agresivo aceptar que muchas veces “Los árboles no dejan ver el bosque”



ATINA BOMBEROS

1 Comments:

Anonymous Anónimo said...

BUEN TEMA..............

6/12/07 18:27  

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