04 mayo, 2006

¿Cual es nuestro perfil de Bomberos?

Antes que nada, una explicación necesaria:
Mi ausencia del blog fue más breve de lo que pensaba, debido a dos buenas razones:
La primera, las conversaciones con algunos amigos bomberos que insistieron en la conveniencia de mantener este tipo de páginas por su contribución al bomberismo y dos opiniones recién llegadas de Bomberos que no conozco y a los que agradezco mucho sus palabras.
La segunda, por mi propia salud mental ya que tengo muchas inquietudes para compartir y si no lo hago me voy a sentir culpable o me voy a enfermar.

Atina Bomberos para mí, tiene un efecto parecido al que le produce al hombre que sube a la cima de un cerro a gritar "sus verdades” aunque no lo escuche nadie.

En este caso debo reconocer que por lo menos algunos leen y por lo mismo pueden escuchar y que no opinen es una pena por la oportunidad que se pierde, pero yo al menos voy diciendo lo que siento y talvez a más de uno le servirá para reflexionar al respecto.

El tiempo dirá si sirvió para algo, pero como persona y Bombero debo ser fiel a los principios y valores en que creo y que estoy seguro son parecidos a los de los que visionariamente nos fundaron, los que con gloria nos han antecedido, a los que hoy con su esfuerzo mantienen vivo este ideal forjado con amor en 155 años y leal con los que espero tendrán los que nos sucederán en el futuro.

Como vamos cambiando...

No sé si existirán estudios sociológicos o psicológicos sobre el perfil del bombero chileno.

Debe ser interesante conocerlo, porque deberían aparecer muchísimos aspectos positivos y valóricos y también varios negativos.

No pretendo hacer yo ese perfil porque no tengo los conocimientos teóricos, por lo que sólo puedo reflexionar desde mi experiencia.

El Bombero es una persona que ingresa joven a la institución por diferentes motivos que pueden ser o no acumulativos: Tradición familiar; amigos que son bomberos; deseos de aventura; ganas de sentir la adrenalina fluyendo a full en un incendio; por demostrarse audacia y superar miedos; por interesarse en esta vida tan peculiar; por figurar o impresionar a alguien; por “tincarle”; sólo por deseos de servir a la comunidad y quizás cuantas más; pero siempre con la seguridad de que se entra en un servicio del que otros esperan de uno.

Y el que ingresa sabe que se someterá voluntariamente a un régimen disciplinado que le entregará muchas satisfacciones, pero le quitará libertad, le demandará gastos por cuotas mensuales y por uniformes, le hará cambiar algunas de sus costumbres o gustos, como no poder “carretear” muchos fines de semana por tener que hacer Guardia nocturna, cuidarse en los tragos para poder tripular el carro y otras limitaciones que se asumen con más o menos agrado.

En dos palabras, un Bombero de Chile es una “buena persona”, como lamentablemente no hay muchas hoy en día.

Al poco tiempo dentro de la Compañía se dará cuenta que todo lo que esperó se está realizando - salvo lo desagradable de tener que pedir limosna - y que se siente feliz de ser útil a la sociedad en una tarea que nadie más que los Bomberos saben hacer bien.

Quizás los primeros cinco o seis años son los más lindos, aunque deben compatibilizarse estudios, trabajo y pololeo para cumplir a lo menos con las Listas obligatorias para que no lo "pillen". Las medallas llegarán después.

Es como el tiempo de la infancia o adolescencia. Se entrega alegremente lo mejor de uno sabiendo que alguien velará por su seguridad y bienestar.
Aparecen, se demuestran y se viven valores o conceptos, como lealtad, valentía, solidaridad, heroísmo, abnegación, colaboración, disciplina, desprendimiento, unión, trabajo en equipo, deseos de capacitarse y varios otros. Todos positivos.

Es rico esperar los incendios, pasar en el cuartel la temporada de los incendios forestales, donde a lo menos habrá uno por día, sobre todo porque además coincide con las vacaciones; Conversar con los “viejos” sobre anécdotas y otras historias bomberiles, ciertas o no, etc. Lindo, entretenido, motivador. Se trabaja harto pero se disfruta mucho.

Van pasando los años y el Bombero raso va debiendo asumir cargos de Oficial, para lo cual puede ser entrenado o no, pero aún queda tiempo: Hay toda una vida por delante.

(En mis tiempos de bombero joven, en la Tercera existían los Sargentos, cargos de sub oficiales que servían para aprender del mando y de las responsabilidades de los Oficiales como llevar el Libro de Guardia y asumir el mando activo en ausencia de los Oficiales: Inolvidable 1967 para mí)

Y mientras se ejercen cargos de oficiales subalternos, la realidad bomberil se sigue viviendo dentro de los cuarteles y de la Compañía, salvo una que otra escaramuza con oficiales de otra Compañía en algún acto de servicio, que normalmente es solucionada por los superiores sin mayor drama.

Pero a medida que se va llegando a los cargos superiores, no por ello mucho más importantes, la realidad va cambiando. Van apareciendo otros sentimientos, ambiciones más o menos leales con la causa global y deseos de mayor representatividad, protagonismo o figuración personal.

Ahí se complica lo lindo de la infancia y la pubertad bomberil y algunas veces se ensucia también... Como es la vida del adulto.

¿Por qué cambiamos tanto?

Varias veces empieza a confundirse la representación entre lo que piensan o dicen las Compañías con lo que personalmente piensan los que las dirigen y se empieza a incubar una dramática incomunicación entre los Bomberos de Compañía y sus representantes, llámense Directores o Capitanes, que se convierten en verdaderos filtros de información.

Y allí, en las reuniones de Directorio de los Cuerpos o en las Reuniones de Capitanes muchas veces se presentan posiciones que no siempre son compartidas por las Compañías. No estaría mal ya que fueron elegidos porque eran considerados capaces de representar el mandato que les dieron y ése pasa por poder discernir con buen criterio lo que es más conveniente para la Institución.

Pero en algunos casos, al igual que sucede con Oficiales Generales, Regionales o Nacionales, queda la duda de qué es lo más conveniente para qué Institución: ¿Cuerpo, Compañía, Junta Nacional o Regional?.

¿O de la propia y personal?

Muchas veces éste es el punto donde se inician los reales y graves problemas que separan y complican a los Bomberos. Como se ha dicho tanto: ¿Uno entra a una institución para servir o para servirse de ella?

Y muchas veces el que despotricaba contra lo que hacía su antecesor, al asumir el cargo lo hace varias veces peor, olvidándose de sus anteriores dichos y sentimientos.

Lo bueno para él es que nadie se lo echará en cara porque ahora él es el jefe y por lo tanto les serán sumisos en las reuniones oficiales y hablarán en contra de él gran parte del tiempo restante, lo que no siempre sabrá por lo que tampoco le importará mucho.

Pero a sabiendas de esta realidad, en las Instituciones, (no tanto en las Compañías), el jefe podrá hacer y deshacer a su entero placer ya que por “tradición o costumbre” muy pocos Directores le discutirán de frente, por lo que en el fondo todos lo apoyan ya que lo normal es no dejar constancia en acta del disenso.

Una vez un Super le preguntó a otro Oficial General sobre una determinada decisión en que tenía una duda. Su respuesta: Nunca se ha hecho así, pero si a tí te parece, hazlo. ¿Era sincero? ¿O le daba lo mismo lo que ocurriera?, o quizás serviría o ¿esperaba que se equivocara para criticarlo después?

Como varias veces ha dicho un distinguido Oficial Nacional: ¿Por qué será que los Bomberos que son tan buenas personas, leales, unidos y solidarios cuando están ante el peligro del servicio o una catástrofe, son tan virulentos y crueles en sus rivalidades?

¿Por qué no se pueden cultivar los trabajos en equipo? ¿Es desconfianza hacia los demás o temor a que puedan tener mejores argumentos que los propios en un momento?

Siempre he querido pensar que como esta actividad es esencialmente valórica, los valores o creencias personales pesan mucho en las decisiones, lo que en el fondo si bien es entendible, desde el punto de vista de la organización puede ser nefasto.

Que un ser humano, hermano del mismo ideal se olvide de lo que se comparte para dar rienda suelta a favores o rencores hacia alguien, sin acordarse que hay normas de convivencia establecidas en la Constitución de la República, en los Estatutos y Reglamentos, en este caso de los Cuerpos, no es aceptable ni entendible.

Se exageran los favores por distintos motivos, muchos de ellos de interés personal (apoyo, votos, “hacer vista gorda”) olvidando que los recursos son de la institución y no de propiedad de ellos. Por otro lado se consideran ofensas personales o a la disciplina cualquier disenso, aunque esté de acuerdo al reglamento y se castiga con dureza.

Para qué decir de cuerpos chicos de dos compañías, en que una, la del Super, tiene todo en cuanto a materiales y la otra, nada. Pero que se prepare para cuando pueda darse vuelta la tortilla...

Y sin embargo, los demás que comparten el poder nada dicen. ¿Por qué? ¿Pensarán que el jefe si se cae se caerá solo? ¿Les interesa tanto el puesto?Ignorantes o indolentes, no sé que es peor ni qué se ajusta más.

Lo qué sí tengo claro es que todos quieren ser caudillos o dictadores en su nivel, por lo que no aceptarán ni ayudas ni críticas.

Y lamentablemente no son pocos los que terminan su mandato por motivos diferentes y se transforman en bomberos despechados, negativos y que divulgan rumores o simplemente que son ignorados por todos.
Sin darse cuenta han aparecido varios anti valores o conceptos, que se cambian: Egoísmo, prepotencia, personalismo, protagonismo, arrogancia, intolerancia y varios más.

“Después de mí el diluvio...”

En la mayoría de los Cuerpos no se planifica ni siquiera a mediano plazo. No hay preocupación por el desarrollo de la institución: Se vive sólo el HOY. ¿Mañana? En una de esas es problema de otros... “Si me consigo un carro me lleno de gloria. Otros verán como lo pagan. Mientras yo esté en el poder me las arreglaré para no pagar, eso lo saben y por lo mismo votarán por mí”; “Si hay una oportunidad de adquirir algo, útil o no, lo compro, ya veremos como se paga. Sirve para mi imagen ”; ¿Establecer prioridades o proyectos mayores que después puedan beneficiar a otros? Loco.

Por otro lado, sobre todo en los cuerpos más grandes que cuentan con una variada gama de profesionales o técnicos entre sus filas ¿ a cuántos le piden asesoría para no decir cooperación o ayuda? ¿Sería hipotecar el poder? "Si coinciden y avalan lo que pienso bien, si nó están equivocados"

Como dice un amigo que se preocupa de estudiar estas cosas: ¿Cuantos ex Oficiales Generales siguen colaborando activamente en los Cuerpos dentro de los diez años siguientes al que dejaron el cargo? ¿Es qué su experiencia no podría haber servido de algo a alguien? Varios Cuerpos tienen incorporado en sus reglamentos una solución a esto con resultados a la vista. Muchos siguen viendo un peligro en eso.

La respuesta la conocemos casi todos y nos sirve para entender porqué los Bomberos no podemos crecer como institución profesional, no tanto en el servicio activo gracias a Dios, sino como organizaciones más modernas y eficientes en el uso de los recursos humanos tan ricos que tenemos y gratis que podrían compensar en parte la falta de recursos económicos. Y es sólo por culpa de nosotros.

¿En qué momento nos lavamos el cerebro para dejar de pensar en forma similar a como cuando ingresamos, cuando todo era buenos propósitos, buenas tradiciones de caballeros y los mejores deseos y empeño de hacer las cosas bien?
Un muy grato oasis

En Valparaíso, desde el año 2001 (sesquicentenario del Cuerpo Fundador) nos reunimos cada cierto tiempo a almorzar en un Cuartel cedido gentilmente por alguna Compañía, el “Cuartel de los 60”, formado por los que ingresamos a las distintas Compañías en esa década.

Ya todos somos adultos (no mayores todavía). Un gran número ha sido Oficial General o de Compañía y algunos aún lo son. Lo rico de estas reuniones es que mantenemos el mismo espíritu festivo y amistoso que teníamos cuando nos encontrábamos en los techos.

Por supuesto que hablamos de bomberos, de historia, de carros, de anécdotas, de algún pelambrillo, pero con la jurada abstención de intervenir en asuntos contingentes, a menos que a alguno en forma personal e individual se lo solicite en otra instancia la autoridad del Cuerpo.

¡Y que bien lo pasamos! Somos amigos o conocidos desde hace más de cuarenta años y mantenemos el espíritu de cuando ingresamos. La mayoría, estamos nuevamente disfrutando de la alegría de ser Bombero raso, poder participar responsablemente en actos de servicio, pero sin mayores ambiciones u obligaciones, aconsejar cuando se nos pide, pero contentos de volver a vivir muchos de los sentimientos que nos hicieron ingresar a Bomberos.

Entonces, si se intentara hacer un perfil del Bombero Chileno, ¿cual etapa de la vida marcaría las características más relevantes?

Es como para pensarlo a lo menos... ATINA BOMBEROS

6 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Me alegra que vuelvas a escribir " tus verdades " , que son también la de muchos.
No hay duda alguna que tú esfuerzo es importante para el bomberismo.
Trataré de " publicitar " tú blog para que pueda ser leido, especialmente, por los bomberos jovenes.
Una brazo,
CARLOS VEGA J.

5/5/06 15:57  
Anonymous Anónimo said...

Me alegro que podamos seguir contando con sus conocimientos y a la ves intruirnos con las inquietudes que van naciendo en el desarrollo de nuestra vida bomberil...con respecto a lo publicado "nuestro perfil" creo que es muy importante primero que todo tomar en consideracion un artículo antes expuesto "el casco de la sabiduría", donde son varios los aspectos que podemos rescatar de él, buscando un perfil idoneo compatible con nustra actividad. pero si bien es cierto en nustras filas encontramos gran variedad de personas, con diferentes formas de ver las cosas, lo cual no es malo, pero creo yo que deberiamos ser más abiertos de mente, aceptar otras ideas y lo más importante ACEPTAR NUESTROS ERRORES, que es lo que muchas veces nos nubla para seguir adelante. importante lo que mencionaba usted respecto a la planificación a un plazo mayor, crear cosas como compañia que no solo duren por el tiempo en que cierta oficialidad esta al mando, sino deberiamos ser capaces de ver un trabajo, con proyectos a sacar adelante como compañia, no como un oficial en particular. talves muchos con el tiempo nos creemos el cuento y pensamos que todo lo que hacemos esta bien, porque nadie nos dice lo contrario por el miedo talves a ser sancionado o por la lealtad a los oficiales. creo yo que debemos acercar a los oficiales a los voluntarios, para permitir un trabajo en miras de un mayor crecimiento y profecionalismo. dentro de un cuartel somos uno solo, una misma familia, nos une una nobleza enorme que no hay que perder, debemos conserbar siempre las ganas que tenemos cuando jovenes y si fracasamos, no creo que sea razon para perder estas ganas, sino levantarse aprender del error y no volver a repetirlo, muy importante en ello el apoyo de nuestros hermanos bomberos... don Domingo muchas gracias por seguir con nosotros y aportarnos de su sabiduria bomberil, espero este muy bien en todo...hasta la proxima
Carlos Gutierrez M.
cafir@hotmail.com
PD: estamos dando a conocer el blog...

5/5/06 23:00  
Anonymous Anónimo said...

Voluntad y politicas claras y escritas hacen falta en los cuerpos de bomberos, es verdad que hemos cambiado y a veces trabajamos en base a lo escrito ahce 100 años, evolucionemos sin perder nuestras tradiciones lo, dejo a su disposicion el tema para su analisis.

8/5/06 18:44  
Anonymous Anónimo said...

ASUMAMOS LOS COMENTARIOS CON NOMBRE Y APELLIDO. NO TENGAN MIEDO DE EXPRESAR SUS OPINIONES O REPAROS, MIENTRAS ESTOS ESTEN DENTRO DEL TRIANGULO DE ORO DE LA CRITICA: TIEMPO ; LUGAR ; FORMA.

CARLOS VEGA J.

9/5/06 16:07  
Anonymous Anónimo said...

Don Domingo;

Me parece que un análisis como éste lamentablemente tiene más que ver con la idiosincracia de nuestra nación que específicamente con los bomberos(lo que naturalmente no obsta a que sea un llamado de atención). El chileno por larga data es capaz de poner el hombro junto a su vecino en circunstancias complejas y urgentes, pero cuando dejan de serlo no evita asumir actitudes como las descritas donde se lucha por pequeños feudos de vano poder. Parafraseando a un oficial general porteño, "los reglamentos fueron creados por caballeros para caballeros" y esa impronta de caballerosidad es algo que lamentablemente en nuestra sociedad es casi un objeto de estudio simplemente. Espero que los bomberos de hoy estemos a la altura del desafío de trabajar con humildad y exigir de nuestros superiores igual actitud.
Felicitaciones por el trabajo que realiza.

Gonzalo Le Dantec

10/5/06 15:01  
Anonymous Anónimo said...

Don Domingo:
Bien tarde he leido este comentario. Uno cuando deja la institución, percibe desde la vereda de enfrente lo que dejo y lo que era esa casa donde estaba.
Yo siempre he creído, que la labor voluntaria de los bomberos en Chile debería llegar a su fin. Cómo? dirá usted, bien lo que pasa es que todos los recursos que se desaprovechan, las fallas que se cometen, justamente son expresión de la caída en picada de los valores y los principios que se suponen nos inspiraron a entrar. esto es una profesión. Totalmemte formal, que requiere preparación, formación valórica, capacidad física, de gestión,etc. Ya paso el tiempo de los filantrpos que la iniciaron. La seguridad de las personas es esencial y, desde mi punto de vista, no puede estar sujeta a estos abatares y al tiempo sobrante de las personas que la integran.
Chile porque sus bomberos no quieren, no ha analizado la posibilidad de tener un servicio profesional.
Chile no necesita 40.000 bomberos, ni más de trescientos Cuerpos.
Hay que buscar mejorar, pues quizás no hoy, pero va a llegar un Presidente de la República con un Ministro del Interior lo suficientemente capaz de mirar a la Seguridad Ciudadana, no solo como un fenomeno policial, sino como el proceso complejo e integral que es y se preguntara, son nuestros bomberos lo sufiecientemente capaces de enfrentar los desafiós del nuevo milenio?.
Ojo, los bomberos se han creido y hecho creer a la gente ese viejo cuento de que es carisimo tener bomberos profesionales pagados. Chile armó toda un nuevo sistema procesal penal de la nada, con nuevos edificios y un monton de profesionales. Los bomberos tienen todo ya armado, hasta el centro de entrenamiento para formarse.
Cuidado, los dinosaurios perecieron a consecuencia de un gran cambio en la Tierra, sea cual haya sido, no lo pudieron confrontar, no les vaya pasar lo mismo a los bomberos voluntarios.
Duro lo que escribo, quizás, tal vez solo critico para que se produzcan los cambios y las autoridades en vez de burlarse de los Cuerpos "más engrupidos" en ser mejores, lideren los procesos para ser verdaderamente mejores, transformando los reglamentos, estandarizandose, normando el ascenso a los cargos, para que se termine de una vez el jueguito político de llevar oficiales por acuerdos y no por su verdadera capacidad, que sean elegidos por todos los bomberos.
Saludos y gracias por la tribuna.


LUIS

30/5/06 14:21  

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