25 septiembre, 2008

Gestiones en la Comisión Bomberos

En ATINA BOMBEROS seguimos siempre con el mayor interés las noticias referidas a los Bomberos que se van produciendo en los distintos ámbitos y que se publican en los medios que normalmente leímos, debiendo reconocer que muchas veces nos quedamos sólo en lo oficial, sin hurgar en sectores donde están las noticias en desarrollo como dicen los periodistas.

Afortunadamente tenemos algunos buenos amigos más acuciosos que nosotros que nos apoyan enviándonos informaciones sobre lo que está pasando oficialmente y que son reales, es decir no tienen nada de rumor, ya que ésos no los tratamos en estas páginas.

Desde hace un tiempo, el Presidente Nacional de Bomberos ha desarrollado una intensa agenda con la Comisión Especial de Bomberos de la Cámara de Diputados, que afortunadamente volvió a constituirse produciendo en estos pocos meses notables avances para nosotros. Eso es muy bueno y lo valoramos absolutamente.

Creemos que el esfuerzo que ha hecho el Presidente ha sido muy fructífero y encomiable, toda vez que conocidos el compromiso e interés por Bomberos que tienen estos Diputados y sus ocupaciones políticas que les demandan mucho tiempo, debe apoyárseles fuertemente en un tema en que varios pueden desconocer la totalidad de los problemas que los afectan y su profundidad.

La Comisión se ha preocupado por el trabajo que ha estado haciendo la SVS y ha actuado pidiendo que se mejore su actuación para hacer cumplir correctamente la ley y no seguir perjudicando a los bomberos accidentados y los recursos solicitados para ayudas extraordinarias.

Esto es muy positivo y por el hecho de ser una bancada trasversal tiene muy buena acogida en los legisladores.

Es así como hemos visto que la Sala ya aprobó un proyecto elaborado por la citada Comisión, que modifica la Ley de Accidentados en Actos de Servicio que permitirá - en caso de convertirse en Ley - que familiares directos de Bomberos Mártires que no dejen descendencia, puedan beneficiarse de una pensión vitalicia aunque no hayan vivido a expensas de éstos.

Si bien es un tema que seguramente será muy analizado por la complejidad que reviste, cubre un vacío que se produce con los casos de los mártires jóvenes que muchas veces eran la esperanza de futuro de familias de escasos recursos que invertían en su educación. De los últimos cinco mártires entendemos que a lo menos tres estaban en esa condición. Ojalá sea aprobada.

Revisando las Actas de esta Comisión Especial, aparte del estupendo interés de los H. Diputados por nuestro tema y las iniciativas que están tomando, nos encontramos con la del 9 de julio 2008, donde se registra otra intervención del Presidente nacional, esta vez referida a la necesidad de contar con una Ley Marco que regule la actividad bomberil chilena.

Éste es un tema que nos ha preocupado desde muchos años a todos los Bomberos que nos interesamos en nuestra institucionalidad actual y futura y que se puede encontrar en varios artículos de este ATINA BOMBEROS.

En su participación el Presidente hace una síntesis muy completa de como funcionan los Bomberos Chilenos y los problemas que se registran principalmente en el financiamiento y la facilidad con que se autorizan cuerpos nuevos sin preparación ni responsabilidad, lo que como es obvio compartimos completamente y nos sentimos contentos de haberlo denunciado muchas veces en estos artículos.

También se aboga por la necesidad de que el Estado tenga un interlocutor único con los bomberos, situación que apoyamos absolutamente también ya que nos parece indispensable.

Creemos que conseguir una ley marco como se le ha llamado sería un paso fundamental para reconocer de manera orgánica el sistema bomberil chileno, dándole el respaldo legal, funcional y presupuestario que una actividad tan importante requiere para actuar eficiente y profesionalmente.

Estamos conscientes que no será fácil llegar a obtenerla porque hay muchos elementos y pensamientos que se conjugan en esto, por lo que no siempre será posible alinear a todos los cuerpos en pos de una solución armónica, pero hay que intentarlo. Es importante y urgente.

Donde nos asalta una más que razonable duda es en el siguiente párrafo que copiamos de la página de la Cámara, referido a la intervención del Presidente Nacional:

“Estimamos, que debe ser a través de una ley marco, donde se instaure un ‘Sistema Nacional de Bomberos”, se defina su organización, funcionamiento, financiamiento y facultades, otorgando a la Junta Nacional de Cuerpos de Bomberos, las necesarias facultades, para que en su carácter de órgano técnico, pueda controlar el correcto funcionamiento del servicio bomberil, dotándola de competencia para actuar ante situaciones que pongan en riesgo el funcionamiento y eficiencia del servicio bomberil y entregándole competencias para conocer y resolver los conflictos de carácter disciplinario producidos entre los integrantes de los diversos Cuerpos de Bomberos, además de determinar el órgano del estado a través del cual se relacionan con el Ejecutivo y el organismo encargado de fiscalizar el uso y destino de los recursos públicos.” (destacado por nosotros)

Estamos muy de acuerdo en que hay que organizar el sistema bomberil, porque existen muchas diferencias en la forma en que actúan, en lo activo y administrativo un cuerpo y otro y el servicio debería ser razonablemente parejo de acuerdo a las necesidades de las comunidades o lugares de que se trate, lo que hemos comentado mucho en ATINA BOMBEROS. Esto se agrava por la inseguridad que representa para la ciudadanía que el ministerio de justicia otorgue personalidad jurídica a grupos que no tienen ninguna preparación para ejercer una misión muchas veces de vida o muerte.

También compartimos absolutamente que debe haber una cabeza rectora del sistema, que evite la cada vez mayor judicalización de los problemas de los bomberos, que podría ser la Junta u otra DEFINIDA Y ACEPTADA POR LOS BOMBEROS Y SANCIONADA POR LA LEY, pero no al revés como entendemos del párrafo en comento.

Creemos que la Junta no puede pedir facultades ni atribuciones legales sin tener la autorización de los Cuerpos, ya que - desde nuestro punto de vista no jurídico – los estatutos vigentes no le dan esa representación, pues pensamos que en éstos a pesar del nombre sigue siendo sólo coordinadora de cuerpos de bomberos.

Y mientras los Cuerpos de bomberos no aprueben nuevos estatutos sentimos que la Junta no puede insinuar solicitar al legislador una representatividad que no tiene y hacerlo es arriesgado.

Por eso – y como lo hemos insistido tanto en ATINA BOMBEROS – los Bomberos deben trabajar para encontrar una fórmula que comprenda también la idiosincrasia de los Cuerpos, su estructura y tradiciones, las que sin ninguna duda han sido la base del éxito de este servicio privado y voluntario por 157 años.

Traspasar al Estado la responsabilidad de organizar a los bomberos y asignar a la Junta una representatividad que actualmente no tiene entre los bomberos, sin una previa y profunda discusión en los Cuerpos, lo consideramos muy delicado.

Antes, los propios Bomberos debemos discutir sobre la organización que necesitamos y que creamos que nos representará bien, compatibilizando lo más posible las experiencias y necesidades de los cuerpos para funcionar bien a escala nacional, tanto en lo activo como en lo administrativo y disciplinario.

La Junta no tiene infraestructura humana ni material para liderar a los bomberos en forma integral. Lo hemos dicho muchísimas veces y lo reiteramos: La Junta ha desarrollado un aspecto financiero comercial dentro de la actividad bomberil, que puede ser aprobado o cuestionado pero que ha tenido éxito en cuanto a que los cuerpos están mejor equipados, pero de ahí a ser un referente en lo organizacional no es cierto.

Los Bomberos, dependientes directos de los Cuerpos, son los que actúan en las emergencias. La junta es administrativa o administradora de recursos económicos y proveedora que subvenciona pero nada más.

Es absolutamente necesario normar porque hay muchos cuerpos que funcionan mal en todo sentido y en eso, como organización única o no, hay que ser responsables con la comunidad, pero son muchos más los cuerpos que funcionan bien, por lo que no se puede nivelar para llevar a un mínimo a los malos, en desmedro de la gran mayoría.

Y en eso los Cuerpos que funcionan bien tienen mucho que decir. Y la Junta con su estructura actual, muy poco.

Nunca hemos dicho ni insinuado, que podría ser fácil poner de acuerdo a todos los cuerpos de bomberos, más bien creemos no ser pesimistas al considerar que será muy difícil llegar a un acuerdo general nacional, pero sí afirmamos que debe ser el paso anterior al de pedir que sea armado un sistema por ley.

Eso podría llevar a muchos cuerpos, sobre todo importantes, a salirse de la Junta o de la organización que se nombrare si no los representa bien o si no se sienten partícipes activos de ésta.

Y cada uno es una corporación de derecho privado con personalidad jurídica independiente.

Estamos muy de acuerdo que hay que mejorar mucho lo actual, pero no puede ser sólo con buenas intenciones. Primero hay que normar, es decir crear políticas y procedimientos aceptables y aceptados por todos los cuerpos. Hay que crear mallas curriculares que deban acreditar cumplir los candidatos a los cargos de nivel nacional.

Hay mucho por hacer antes de plantear siquiera la posibilidad de pedir una ley que nos ayude a ser mejores o funcionar mejor, porque – sin saber qué saldrá o salió del ejercicio de planificación estratégica – somos muchos los que desconocemos lo que piensan y esperan los cuerpos de bomberos de nuestro servicio en el futuro.

Muy buena e interesante y con toda seguridad bien intencionada la exposición de nuestro presidente nacional, pero por lo menos desde nuestro punto de vista, en el aspecto comentado un tanto arriesgada aunque represente el pensamiento del Directorio Nacional y que aparentemente no ha sido informada a los 35.000 bomberos chilenos, que están agrupados en más de 300 cuerpos.
A lo mejor somos nosotros los desinformados y ya hay acuerdos al respecto, pero no creemos...

Es una lástima que no se hayan hecho esfuerzos conocidos por concordar una normativa interna – ni siquiera se ha hecho y aprobado un reglamento nacional – antes de comentarlo en la Comisión Bomberos, donde ya se pidió que se enviara una proposición de un proyecto de ley marco.

¿Cuales podrían ser los próximos pasos y consecuencias?

Si bien es cierto que no hay ninguna decisión tomada y que el acuerdo de la Comisión Especial es seguir trabajando con la mejor intención es esta indispensable ley, nuestra preocupación es que antes de seguir avanzando exista un explícito compromiso de los Cuerpos ya que el cambio que podría venir lo amerita.

Para ATINA BOMBEROS lo fundamental de nuestro buen servicio está basado en el amor, el compromiso, la ética y la abnegación para entregar la mejor y más profesional ayuda a la comunidad siendo voluntarios, no rentados y racionalmente autónomos.
ATINA BOMBEROS